Valladolid cierra este domingo diez intensos días de fiestas en honor a la Virgen de San Lorenzo, su patrona, cuya festividad se celebra hoy.
Una jornada festiva agradable en lo climatológico, con el sol brillando en lo alto, aunque con alguna nube, que los vallisoletanos celebran con entusiasmo por las calles de la ciudad.
Entre ellos, el primero de los vallisoletanos, el alcalde Jesús Julio Carnero, que ha participado con el respeto y fervor habituales en él en la procesión por el casco histórico desde la iglesia parroquial de San Lorenzo hasta la Catedral y viceversa, pasando por la tradicional alfombra de flores en la Plaza Mayor.
Carnero aprovechaba también para pedir a la patrona de Valladolid estabilidad y prosperidad económica para España ante los convulsos momentos que vive en lo político, pero también y sobre todo que ayude a los vallisoletanos a que puedan desarrollar en la ciudad su proyecto de vida, sobre todo los jóvenes.
“Lo que le pido a la Virgen es que tengan posibilidades para hacer un proyecto de vida aquí en su ciudad. Que todo aquel que tiene empleo y lo quiera mejorar pueda hacerlo y quien no tiene empleo lo encuentre”, decía, en declaraciones recogidas por Ical antes de iniciar la procesión de la patrona.
Asimismo, el alcalde tenía un especial recuerdo” para la comunidad venezolana en Valladolid y para todo el país de Venezuela por los complicados momentos que están atravesando en su país.
Reavivar el domingo
Ya en la Catedral, tras la llegada de la procesión, se celebraba la eucaristía en honor a la Virgen de San Lorenzo, con cientos de personas presentes abarrotando la Seo vallisoletana.
El Arzobispo de Valladolid, Luis Argüello, presidía la misa en la pedía a la alcaldesa perpetua de Valladolid que interceda para “reavivar el sentido y la celebración del domingo”, fiesta central del catolicismo.
Lo hacía durante su homilía, donde recordaba que desde los tiempos apostólicos, el domingo ha sido considerado sagrado por su estrecha relación con el núcleo del misterio cristiano: “La resurrección de Jesucristo”.
“El domingo ha sido la Pascua de la semana en la que se ha celebrado la victoria de Cristo sobre el pecado y sobre la muerte”, decía en su sermón, donde llamaba a la renovación espiritual e invitaba a los fieles a “redescubrir el significado profundo del domingo”.
Asimismo, animaba a salvaguardar el sentido religioso y comunitario de esta jornada, “porque sin el domingo no hemos podido vivir”.
Finalmente, el prelado vallisoletano hacía referencia a la necesidad de reavivar el valor del domingo como “jornada de fe, esperanza y caridad”, en un contexto donde el “fin de semana se ha convertido en una mera oportunidad de entretenimiento”.
La celebración finalizaba con una oración a la Virgen de San Lorenzo, patrona de la ciudad.
