Contratación de más de doscientos profesionales de la medicina en Asturias en medio del plan de choque contra las listas de espera. Así lo ha anunciado el Gobierno de Asturias esta mañana. Concretamente han sido 206 los profesionales contratados que reforzarán la áreas de Salud Mental, Atención Primaria y Atención Hospitalaria, áreas en las que se les ha ofrecido “vacantes estables”, según han explicado desde la propia Administración Regional.
La mayor parte de las nuevas incorporaciones, concretamente 114, corresponden a facultativos que acaban de finalizar su especialidad en Asturias, bien en la convocatoria de mayo (21) o en la de septiembre (93). Otros 20 llegan al Sespa tras culminar su residencia en otras comunidades.
El sistema sanitario público ha logrado retener al 90,3% de las personas que se formaron en el Principado en alguna de las especialidades con mayor demanda, fundamentalmente medicina y pediatría de atención primaria, anestesia, dermatología, psiquiatría, urología o radiodiagnóstico.
En este sentido, el Sespa (Servicio de Salud del Principado de Asturias) ha incorporado a 35 profesionales de las especialidades más difíciles de cubrir: diez de radiodiagnóstico, cuatro de dermatología, dos de urología, doce de anestesia y siete de psiquiatría. También ha contratado a 50 especialistas en Medicina Familiar y Comunitaria y cuatro pediatras para atención primaria.
Fue en mayo de este mismo año cuando la Consejería de Salud anunció la puesta en marcha de un Plan de Choque para reducir las listas de espera en atención quirúrgica. Un plan que pretende que, al finalizar este año, se hayan llevado a cabo más de 70.000 cirugías programadas, lo que supone incrementar la actividad quirúrgica en al menos 500 operaciones al mes.
Este plan dispone de un presupuesto de partida de 60 millones de euros, aunque, según fuentes del Principado, el techo de esta partida la marcará el día a día. Así lo explicó el gerente del Sespa (Servicio de Salud del Principado de Asturias), Aquilinio García, cuando anunció los pormenores de este plan.
Lo que se viene haciendo desde entonces es, principalmente, operaciones en horario de tarde. Y también por la tarde hay consultas y se hacen pruebas diagnósticas. También se ha reforzado la colaboración con la red concertada y privada, lo que supondrá ampliar de 40 a 47 millones el presupuesto de los conciertos sanitarios.
Este plan de choque ha sido muy bien recibido aunque siguen siendo muy graves las carencias existentes en algunos de los hospitales de Asturias. Concretamente en Jarrio, donde está ubicado el hospital que da servicio a toda la zona Noroccidental, los vecinos y las plataformas llevan años denunciando la falta de profesionales en especialidades como dermatología o urología.
Citas que se anulan, pruebas que se atrasan y continuas derivaciones a otros hospitales obligan, en muchos casos, a que los pacientes tengan que optar por pagar consultas privadas o conformarse sin ser atendidos.
Conscientes de esta situación, el Principado anunciaba a finales del mes de septiembre la contratación de tres nuevos especialistas en Oftalmología, Otorrino y Geriatría. Estos especialistas se suman a los tres anestesistas que trabajan en el centro desde agosto.
Así, una geriatra presta servicio desde el mes pasado en este hospital, asentado en la comarca más envejecida de Asturias. La consulta de geriatría contribuirá a ofrecer una atención de mayor calidad a las personas mayores y era una de las reivindicaciones históricas de los habitantes de la zona .
Los facultativos de los servicios de Otorrinolaringología y Oftalmología comienzan a trabajar en Jarrio en este mes de octubre.
En la actualidad, el Servicio de Otorrinolaringología sólo contaba con un profesional de los dos que forman la plantilla orgánica, lo que supuso un grave aumento de las listas de espera.
La Consejería de Salud asegura que el refuerzo de personal en el Hospital de Jarrio se enmarca entre los compromisos para captar nuevos profesionales para la zona y forma parte de los procesos de traslados y estabilización de plazas que desarrolla el Servicio de Salud del Principado (Sespa). No resulta fácil hacer que las alas de Asturias resulten atractivas para que la gente se quede a vivir y a trabajar en ellas.
