El nuevo modelo de catalán de Formación Profesional, formado por institutos con una oferta especializada en un ámbito, coge forma en Barcelona con una remodelación y redistribución profunda de los cursos. La idea es agrupar los ciclos formativos por ámbitos y ofertarlos en unos centros determinados, pero al mismo tiempo, separar las etapas obligatorias y postobligatorias, creando por un lado institutos escuelas de 3 a 16 años, y después centros donde los alumnos puedan estudiar bachillerato o FP. Al mismo tiempo, se busca ubicar estos nuevos centros en un lugar estratégico, vinculado al tejido empresarial.
Más de 31.000 alumnos sin plaza
Otro de los aspectos que requiere de una revisión es el calendario de inscripción y matriculación de la FP, que este verano vuelve a ser noticia por su excesiva dilatación y tardanza, lo que provocará que, de nuevo, miles de estudiantes se incorporen a las aulas una vez iniciado el curso. De momento hay 31.404 alumnos que solicitaron plaza y no la han obtenido (16.472 en grados medios y 14.932 en superior), según datos del Departamento de Educación. Estos jóvenes deberán esperar hasta el 12 de septiembre, precisamente el día que comienza el curso en la FP, para conocer la lista de vacantes que ha quedado después de que los alumnos que sí han obtenido plaza se matriculen (lo harán durante esta semana). Hasta ahora han logrado una asignación 69.068 alumnos de un total de 100.472 solicitudes. Con todo, se trata de cifras provisionales, ya que normalmente sucede que al final no todos los estudiantes acaban formalizando la matrícula, con lo cual se liberan plazas y aumenta la bolsa de vacantes, que a día de hoy es de 10.384 plazas.
Hace unos días, la nueva consejera de Educación, Esther Niubó, pidió disculpas a los afectados a través de la red social X y se comprometió a intentar evitar que esta situación se repita el año que viene.
