El Gobierno: 89 plantones al Senado y bloqueo a 16 leyes del PP en el Congreso

El Gobierno: 89 plantones al Senado y bloqueo a 16 leyes del PP en el Congreso

Pedro Sánchez ha hecho una maniobra inédita en las 15 legislaturas desde que entró en vigor la Constitución de 1978: ha formado Gobierno pese a haber perdido las elecciones generales y pese a que el PP tiene mayoría absoluta en el Senado. Y eso se está traduciendo en una debilidad parlamentaria que ya no esconden los datos ni tampoco el murmullo que hay entre los socios del Gobierno. El Ejecutivo nació hace siete meses, pero Sánchez tiene problemas tanto en el Senado por la mayoría del PP como en el Congreso por la falta de sólidos apoyos: en la Cámara Alta, está dando muestras de desprecio ya que tan solo ha acudido una vez a sesiones de control, mientras que sus ministros han registrado 89 ausencias; en el Congreso, da muestras de debilidad por la parálisis legislativa ya que no tiene fuerza para tramitar leyes, pero sí tiene capacidad para bloquear la aprobación de 16 iniciativas del PP. De hecho, las cifras son elocuentes: el Gobierno y el PSOE han tramitado menos leyes (12) que el PP (16).

La mayoría absoluta del PP en el Senado se ha convertido en una incomodidad para Sánchez ya que los populares están usando la Cámara tanto para hacer oposición como para tomar la iniciativa legislativa. Los de Alberto Núñez Feijóo han creado una Comisión de Investigación del «caso Koldo» que también abarca el «caso Begoña Gómez» y, además, han dado trámite a doce iniciativas legislativas, la mayoría de ellas con la colaboración de socios del Gobierno. La última proposición de ley se votó el pasado miércoles y recoge exenciones fiscales para las ayudas que reciben los afectados por la talidomida. La colaboración de los socios del Gobierno invitan a pensar que una gran mayoría de esas leyes pueden acabar aprobándose en el Congreso.

Para contrarrestar esa fuerza del PP en el Senado, Sánchez ha optado por el desprecio: tan solo ha acudido una vez a las sesiones de control y fue el 12 de marzo, por lo que ya van más de tres meses durante un mismo periodo de sesiones, un plazo que ningún predecesor había superado (ni Mariano Rajoy ni José Luis Rodríguez Zapatero, que fue quien dio inicio a la costumbre de acudir una vez al mes a la Cámara Alta). Sánchez esquiva el Senado, igual que sus ministros, que han registrado ya 89 ausencias en 14 Plenos que se han celebrado en el Senado en esta legislatura.

Pero no solo los desplantes reflejan el desprecio que tiene por el Senado por la mayoría absoluta del PP, sino también el bloqueo a las 12 leyes de los populares que proceden de la Cámara Alta. En el Congreso, el PP ha conseguido ya dar trámite a cuatro proposiciones de ley gracias a que han superado el primer filtro parlamentario de la toma en consideración. No obstante, todas ellas (las 16), están varadas en la Mesa del Congreso, que está formada por nueve miembros, de los cuales cinco son de PSOE y Sumar. Por tanto, los partidos del Gobierno tienen mayoría en el órgano clave de la Cámara Baja y pueden bloquear el recorrido parlamentario de las 16 leyes del PP, que se encuentran todas en la fase de enmiendas, sin poder dar el paso a la fase de Ponencia.

No obstante, todas las leyes del PP, al ser proposiciones, han tenido que superar una votación plenaria ya (toma en consideración) y eso permite ver si la iniciativa puede acabar siendo aprobada o no. Y, como la gran mayoría de leyes han superado la toma en consideración con la colaboración de socios del Gobierno, todo hace indicar que sí podrían acabar publicadas en el Boletín Oficial del Estado y entrar en vigor.

Esta semana, los populares han dado inicio al trámite de la ley de la talidomida en el Senado y la ley para acabar con los multirreincidentes en el Congreso. En total, ya van 16, mientras que el Gobierno ha registrado 23 en el Congreso y tan solo ha aprobado una. Del resto, hay solo nueve en tramitación (es decir, están en fase de Ponencia, aunque realmente solo ha habido dos que hayan pasado a la fase de Dictamen, paso previo a la votación en Pleno). Es decir, todas las iniciativas del Gobierno están muy rezagadas. El PSOE ha registrado cinco proposiciones de ley y ha aprobado solo la amnistía y está tramitando una sobre ELA.

Mientras el PP consigue ganar votaciones, el Gobierno y el PSOE han sufrido ya varios traspiés en esta legislatura: han perdido un decreto en enero; el proyecto de ley de suelo (al final se retiró antes de la votación); y, la proposición de ley contra el proxenetismo (rechazó rotundo del Congreso). Para «maquilar» esa debilidad, los socialistas han optado, en ocasiones, por votar a favor de las leyes del PP para evitar que la victoria de los populares quede señalada como una derrota del PSOE; o, por presentar proposiciones de ley calcadas a las del PP para que las iniciativas de los populares queden aparcadas en un cajón, como va a ocurrir en el próximo Pleno, donde los socialistas llevan una ley para reconocer, a efectos legales, el carácter de agentes de la autoridad a los funcionarios de Instituciones Penitenciarias, algo que ya estaban tramitando los de Feijóo.

En todo caso, la fortaleza del PP no solo se ha visibilizado con las proposiciones de ley, sino también con otro tipo de iniciativas, como las proposiciones no de ley, que no son vinculantes pero sí lanzan un mensaje al Gobierno sobre las decisiones que debe tomar. En este sentido, ha ganado ya en torno a 80 votaciones de ese estilo, que «mandatan» al Gobierno a tomar medidas en materia económica o internacional (deflactación del IRPF, reducción del IVA a carnes y pescados, recuperar la posición «histórica» de neutralidad respecto al Sáhara…).