Popular, Cuca Gamarra, indicó ayer que la «corrupción tiene sede social» en La Moncloa, donde el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y su mujer, Begoña Gómez, hacen «negocios juntos».
Asimismo, acusó a Begoña Gómez de «conseguir las cosas gratis» y disfrutar de un «enriquecimiento patrimonial a costa de utilizar los contactos que tiene por ser mujer del presidente».
Cuca Gamarra tomó parte ayer en un acto político en Bilbao junto al presidente del Partido Popular vasco, Javier de Andrés, los candidatos vascos al Parlamento Europeo, Javier Zarzalejos y Carlos Iturgaiz, y la presidenta de la formación en Vizcaya, Raquel González, entre otros.
En su intervención, Gamarra destacó que el PP va ganar las elecciones del 9 de junio, en España y en Europa, y apostó por «trabajar para hacer que esa victoria sea lo más amplia posible».
Tras valorar la figura de Javier de Andrés, y el hecho de haber marcado «una tendencia de cambio» desde su llegada a la Dirección, felicitó al PP vasco por los resultados en las pasadas elecciones autonómicas.
«Con un proyecto que llama a un País Vasco abierto, a un País Vasco con ambición, a un País Vasco que sabe que tiene futuro, que tiene muchas oportunidades y que no las va a dejar pasar», argumentó, al tiempo que ha lamentado que el País Vasco se «quede atrás de la mano del Partido Socialista y del Partido Nacionalista Vasco».
Asimismo, resaltó que los vascos que voten al PP no se arrepentirán, ya que los populares defenderán sus intereses y los situarán en la agenda política de las instituciones europeas.
«Desde que Alberto Núñez Feijóo llegó a la dirección de nuestro partido hemos ganado todas las elecciones de carácter general que se han convocado», enfatizó, al tiempo que advirtió de que los comicios del 9 de junio servirán para dar «una respuesta de contundencia ante la mentira».
Tras acusar al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, de ser «una mentira andante», reprobó el acuerdo alcanzado en el Ayuntamiento de Pamplona y que EH Bildu se haya convertido en «socio preferente».
Asimismo, criticó a Sánchez por llevar «en una mano la mentira y en otra el escándalo». «Al principio nos acostumbrábamos a que teníamos un escándalo cada día, y el escándalo del día siguiente tapaba el del día anterior. Hemos llegado a un punto en que el escándalo del mediodía es el que tapa el de la mañana», ironizó.
