Arantxa del Sol ha preferido huir de la polémica y
encerrarse en sí misma, después de que Ana Herminia asegurase haber mantenido un
supuesto idilio con Finito de Córdoba. Ella habla de traición a la presentadora
por parte de su marido, por algo que su pareja, Ángel Cristo, también le tuvo
que perdonar, pero hasta ahora se ha andado por las ramas a la hora de definir
lo que sucedió. Y es que la nuera de Bárbara Rey no quiere que su tema caiga en
el olvido, motivo por el cual ha concedido una entrevista a ‘TardeAR’ para
aclarar las posibles dudas y, de paso, cargar duramente contra sus dos enemigas
públicas: Arantxa y su suegra.
Comienza desgranando los detalles sobre cómo conoció al
torero y cómo fueron sus primeros encuentros, a la vez que advierte a Arantxa
del Sol. Y eso mientras se mantienen en firme de alejarse de los medios de
comunicación y su labor como defensora de su novio en ‘Supervivientes’ para
cuidar su salud mental. Pese a ello, ha entendido necesario descolgar el
teléfono para rememorar cómo “yo conocí a Finito de Córdoba cuando tenía 17
años. Él me ve, yo era una niña preciosa y, por supuesto, el torero vino aquí
con los banderilleros a saco y cuando se da cuenta de que soy virgen dio la
espantá”, detalla cómo fueron sus inicios. Pero no huyó para no regresar, según
su versión de la historia, “eso le causó como ternura e hizo una amistad
espectacular. Que hubo un tonteo, no lo niego, pero no fue una relación, porque
no la ha habido. No lo puedo afirmar”, reconoce ahora para calmar las aguas.
Así, ahora Ana Herminia ya no habla de affaire o idilio,
sino de tonteo entre ella y el marido de Arantxa del Sol. Sea como fuere como
lo llame ahora, ha ampliado información, destacando que sus encuentros tenían
lugar en la piscina del hotel en la que el diestro se hospedaba: “A Juan no le
voy a vender en la vida. No cambio mi paz. He ganado mucho dinero, ganado por
mí”, se defiende la venezolana de aquellas voces que le acusan de estar
rentabilizando la polémica por un interés económico. “Esto no me merece la pena
ni un poquito. Estoy sobrepasada y en una montaña rusa”, reconoce la polémica
novia de Ángel Cristo, que no se despide sin añadir una advertencia seria: “Si
la próxima vez Arantxa me trata a gritos me la como viva”. No parece que vaya a
enterrar el hacha de guerra pese al cariño que dice tener a Finito de Córdoba y
el bonito recuerdo que atesora de sus encuentros en la juventud.
Quizá este nuevo enfrentamiento haya ayudado a Ana Herminia
a entender un poco lo que le decía su suegra al adentrarse en los platós de
televisión. Ya le dejaba claro a Ángel Cristo que entraba en un mundo peligroso
que se le daría la vuelta y saldría mal parado, ahora ella entiende cuánta
verdad tenían esas palabras: “Ahora le doy la razón a mi suegra, que igual que
te suben te destruyen. Le doy la razón. Eso lo dijo Bárbara Rey, que le daba
mucha pena por su hijo, porque igual que lo iban a subir, lo iban a destruir.
Al final su madre va a tener razón”. Pero su discurso no terminó siendo conciliador
con su suegra, aunque pudiese parecer que sí estaban acercando posiciones con
este reconocimiento. Después llegaron los reproches: “A esa señora yo no la he
insultado, no la he faltado al respeto, lo único que dije es que se callara un
poquito, porque no puede ser que un día diga que su hijo se ha muerto para
ella, otro apoye a quien le llama psicópata y después que tiene vergüenza de lo
de la boda. Ángel le ha salvado el culo a su madre por eso yo no entiendo a esa
señora, que está diciendo que me va a demandar porque yo le apoyo públicamente”.
