“Nunca he visto a ningún director conseguir algo así de una orquesta ni tampoco de esta forma”. Lo confiesa Jørn Pedersen, en la sala técnica del Konserthus de Oslo, la mañana del sábado 27 de abril. El productor noruego, que lleva 35 años editando a grandes batutas y solistas en sellos discográficos tan importantes como EMI/Warner y Decca, ultima los equipos para la sesión final de la Sinfonía núm. 7, Leningrado, de Dmitri Shostakóvich. Un retrato sonoro del brutal asedio nazi a la ciudad soviética, durante la Segunda Guerra Mundial, que ha centrado el reciente libro de M. T. Anderson, Sinfonía para la ciudad de los muertos (Es Pop Ediciones).