Las tormentas que azotaron Dubái (Emiratos Árabes Unidos) la semana pasada provocaron una congestión “sin precedentes” en la ciudad y obligaron a Emirates, compañía de bandera del país, a suspender una gran parte de su operativa, lo que ha generado que la compañía acumulara unas 30.000 maletas en el aeropuerto que están siendo gestionadas para que lleguen a sus dueños.