El diario de Amilibia: Dicen que se ha ido al Tíbet

El diario de Amilibia: Dicen que se ha ido al Tíbet

Cuentan las lenguas viperinas de la derecha, la ultraderecha y más allá de la más extrema derecha, que nada más terminar de redactar su carta a la ciudadanía, esa enorme declaración de amor a la Bego, Él se montó en el Falcón y ordenó al comandante que pusiera rumbo al Tíbet, donde se encuentra ahora reflexionando y escuchando los cuencos tibetanos que mejoran el enfoque y la concentración, equilibran los chakras y alivian la melancolía y la ansiedad. Quiere, dicen, encontrarse a sí mismo o hallar su yo más profundo, a elegir. Las portavoces sociatas creen que también realiza esta peregrinación en busca de la luz para dar ejemplo a la oposición cerril que, con armas de destrucción masiva, busca la devastación de su familia y su persona y enloda las almas puras de quienes luchan por traer la democracia popular u orgánica a este país. O sea, que reflexione igualmente Feijóo.

 

Según algunas fuentes, parece que ha sido visto en el monasterio de Drepung, el más grande del Tíbet, alimentándose de té de mantequilla de jak y escuchando a su actual gurú favorito, Avikita Riponché, el que dice «no dejes que una típica frase de autoayuda anime tu día de mierda» y «el secreto de la vida es la honestidad y el juego limpio; si puedes simular eso, lo tienes hecho», frase que luego plagió Groucho Marx durante una visita a la Casa Blanca. Abandonó a su anterior gurú, Padmasambhava, porque se volvió majareta y ahora repite todo el día a golpe de gong «los políticos y los pañales han de cambiarse a menudo y por la misma razón».

Las autoridades chinas temen que al final se autoproclame Dalai Lama y se ponga al frente de los tibetanos independentistas recitándoles frases de Otegi y Puchi y de su invencible «Manual de resistencia».

Leave a Reply

Your email address will not be published. Required fields are marked *