Grecia ya no es lo que era. La cancha del Aris, la del PAOK, la del propio Olympiacos, la del Panathinaikos… escenarios que tantas veces acogieron escándalos arbitrales en favor de los equipos griegos comprobaron en el tercer choque entre Olympiacos y Barcelona cómo los tiempos han cambiado.
Y es que la Euroliga ha emitido un comunicado en el que considera que la falta en el último segundo de la prórroga del jugador del Olympiacos Filip Petrusev, que fue muy protestada por el equipo griego porque supuso el triunfo del Barça en el tercer partido de cuartos de final, estuvo bien pitada, pero admite que previamente el azulgrana Tomas Satoransky tardó más de cinco segundos en sacar de banda y eso sí debería haber sido sancionado. “A falta de 16.3 segundos para el final del último cuarto, el tiempo que el jugador del Barcelona Tomas Satoransky tiene el balón en sus manos antes de realizar el saque de banda excede el límite de 5 segundos (…). Los árbitros deberían haber pitado una violación de 5 segundos resultando en posesión para Olympiacos Piraeus. Falta incorrecta”, explica la Euroliga.
También se pronunció sobre la jugada clave del partido, la falta pitada a Petrusev cuando, con empate a 80 en el marcador, Jabari Parker lanzaba un triple en el último segundo que supuso tres tiros libres para el estadounidense, de los que anotó dos para certificar el triunfo azulgrana, lo que fue muy protestado por los jugadores y el cuerpo técnico local. “A falta de 1,0 segundo para el final de la prórroga, el jugador defensor Filip Petrusev contacta con su mano izquierda con el brazo de Jabari Parker cuando éste inicia el movimiento ascendente que precede al tiro. Los árbitros señalan falta. Decisión correcta”, añade la nota de prensa.
La Euroliga aclara que la revisión de las imágenes de vídeo por parte de los árbitros en esa jugada fue para comprobar que el lanzamiento estaba dentro del tiempo reglamentario, ya que una vez pitada la falta personal, ya no se puede anular.
El Barça derrotó al Olympiacos (80-82) en la prórroga del tercer encuentro de los cuartos de final, disputado en Atenas, y dispondrá de dos oportunidades para lograr el pase a la Final a Cuatro de Berlín. El primero será el jueves 2 de mayo en el mismo escenario y, en caso de victoria griega, la eliminatoria se decidiría en el Palau en el quinto partido.
