Forma parte de las sobremesas. Bebidas espirituosas, como el orujo de hierbas, el licor café o el aguardiente, siguen acompañando conversaciones sobre el mantel. Antaño, en El Bierzo, la jornada en el campo comenzaba con un vaso de orujo, pan y tocino, llamado la parva o desayuno del labrador, y en Galicia, el aguardiente de orujo se utilizaba como remedio para todos los males.