Las carreteras de salida de Madrid soportan esta mañana una gran afluencia de coches que provocan también algunos atascos en Cuenca y Toledo en el segundo día de la operación especial de tráfico para el puente del 1 de mayo, que en el caso de los madrileños se alarga porque mañana es la fiesta de la Comunidad.
A las 10.30 horas de este miércoles, según datos de la Dirección General de Tráfico, había tráfico muy lento en la A-1 a la altura del Circuito del Jarama; en la A-3 en Rivas-Vaciamadrid y desde Arganda del Rey a Fuentidueña del Tajo; y en la A-5 en Arroyomolinos y Navalcarnero.
Ya en la provincia de Toledo, la A-3 también sufría retenciones en Tarancón y Honrubia en sentido Valencia; y en la de Toledo las vías más afectadas eran la A-4 en Seseña y Madridejos en dirección a Ciudad Real y la A-5 en Fuensalida y Santa Olaya hacia Talavera de la Reina.
Por su parte, en la provincia de Valladolid había circulación lenta en la A-6 en Medina del Campo en dirección a Tordesillas.
La DGT mantendrá abierto este operativo especial hasta la medianoche del domingo 5 de mayo, un periodo en el que se esperan 8,4 millones de desplazamientos por carretera.
Se prevé que los destinos principales de los conductores sean las zonas turísticas de costa y litoral (principalmente Andalucía y el levante), así como otras regiones de montaña y segundas residencias.
Para afrontar la masiva afluencia de coches en las carreteras, la DGT ha puesto en marcha medidas como la instalación de carriles adicionales en las horas de mayor afluencia circulatoria, el establecimiento de itinerarios alternativos, la paralización de obras en las carreteras, la limitación de pruebas deportivas y eventos que supongan la ocupación de la calzada, y la restricción de la circulación de camiones en ciertos tramos, fechas y horas.
Además, cuenta “con la total disponibilidad” de medios, tanto humanos (agentes de Tráfico de la Guardia Civil, personal de los Centros de Gestión de Tráfico, patrullas de helicópteros, etc), como técnicos (radares fijos y móviles, drones, furgonetas camufladas, etc) para controlar el tráfico.
En el primer trimestre de 2024, han fallecido en vías interurbanas 261 personas, 36 más que en el mismo periodo del año anterior, lo que supone un incremento del 16%.
