La Casa de la Música de la localidad vallisoletana de Arroyo
de la Encomienda ha albergado la gala de entrega de los IV Premios ADECYL, que
organiza la Asociación de Escoliosis de Castilla y León. El acto, que ha servido para reconocer la labor de
profesionales en el ámbito sanitario, así como la labor de investigación
científica en la lucha contra la escoliosis, también ha entregado
reconocimientos a nivel institucional y socios de ADECYL.
El presidente de las Cortes regionales, Carlos Pollán, ha
entregado el premio extraordinario al Dr. Manuel Fernández, jefe de
traumatología del Hospital de León, que resultó herido por atropello el pasado
20 de octubre cuando asistía a la gala.
En la clausura, Pollán, ha destacado la jornada como “una
jornada para la celebración y el homenaje”. “Os lo merecéis” ha afirmado
dirigiéndose a los asistentes, porque “ya dedicáis los restantes 364 días del
año a la resistencia frente a la enfermedad y toda su problemática derivada”.
También ha profundizado sobre el término “visibilizar” y su
utilización frecuente, para argumentar esa visibilidad “con más razón cuando la
enfermedad que sea forma parte del catálogo de las ‘raras’”. “Raras, al menos,
para los que no tenemos que convivir con ellas a diario bien como pacientes,
bien como familiares”, ha apuntado.
A continuación, el presidente de las Cortes ha destacado el
trabajo de los 20 años de ADECYL desde su constitución para ser el “vínculo” y,
más aún, “el eje de acción” entre personas afectadas por la escoliosis en
Castilla y León. En este sentido ha refrendado su “utilidad pública” ya que “os
propusisteis que ningún enfermo se sintiera desesperado, abandonado, solo. Que
ninguno experimentase la rendición”. Y ha añadido que “cualquier premio siempre
será poco para vuestra labor”.
Para finalizar, Pollán ha deseado que “nunca ninguna persona
afectada por escoliosis vuelva a sentirse desesperada, abandonada, sola” y que
“ninguna considere la rendición como única posibilidad”. Al mismo tiempo que
también ha deseado que “el historial de cada paciente sea el más potente motor
para asociaciones, profesionales, investigadores y administraciones. Y no me
refiero solo al historial médico”.
