Saltarse un semáforo en rojo es una infracción grave
que, según el artículo 65.4.k de la Ley de Tráfico y Seguridad Vial, está
sancionada con un importe de 200 euros y la pérdida de 4 puntos del carné de
conducir. La [[LINK:TAG|||tag|||633614185c059a26e23f7822|||DGT]] utiliza los llamados semáforos foto rojo para
detectar y sancionar este tipo de infracciones que es necesario reducir al
mínimo, por la seguridad de viandantes y conductores. Lo que no quita para que
muchos conductores, especialmente si les cae una multa de este tipo, consideren
que ha sido injusta o que estos semáforos se ubican con intenciones más
recaudatorias que por seguridad. Sin embargo, para que estas sanciones cumplan
con la legalidad deben cumplir determinados requisitos, algo que no siempre
sucede.
Los semáforos foto rojo cuentan con cámaras para grabar
cuando un vehículo sobrepasa un semáforo en su fase roja. Como dispositivo de
medición, están sometidos a la obligación de un control metrológico.
Esto es, la verificación y certificación de que el dispositivo cumple con los
estándares y requisitos establecidos en cuanto a su funcionamiento y precisión.
Según indica María de la O, abogada del departamento
jurídico de Pyramid Consulting, la falta de este control metrológico del
dispositivo vulnera la normativa vigente que en su artículo 83.2 del
R.D.Leg. 6/2015 “establece expresamente que los instrumentos, aparatos o medios
y sistemas de medida que sean utilizados para la formulación de denuncias por
infracciones a la normativa de tráfico, seguridad vial y circulación de
vehículos a motor estarán sometidas a control metrológico en los términos
establecidos por la normativa de metrología”.
La falta de ese control metrológico, por tanto, permite
recurrir este tipo de multas y hay numerosos fallos judiciales relativos a
la necesidad de control metrológico en los semáforos foto-rojo, de acuerdo
con la abogada: “Hay que destacar la Sentencia del Tribunal Supremo de 12 de
noviembre de 2015, que señala que el sistema de foto-rojo sí hace mediciones.
En concreto, opera sobre la medición de los ciclos semafóricos, temporales,
para detectar cuándo no se ha respetado la fase roja. Y esto implica además que
está relacionado con la intensidad luminosa del semáforo, por lo que no
debería estar excluido de control metrológico”.
Otro ejemplo es la del Juzgado de lo
Contencioso-Administrativo nº 1 de Madrid, en sentencia de 9-10-2014, que
también señaló que los dispositivos de los semáforos “no debería quedar
excluido del control metrológico por las magnitudes o elementos que
determinan su funcionamiento”. Y en otra sentencia obtenida por Pyramid
Consulting del Juzgado de lo Contencioso-Administrativo nº 09 de Madrid el
pasado 12 de marzo de 2024 se establece que “el aparato concreto de captación
de las fases del semáforo es un medidor, razón por la cual es necesario
certificado de control”.
Otros motivos que pueden invalidar una multa por saltarse un
semáforo en rojo pueden ser que no exista una indicación de la situación de la
cámara, por defectos de forma a la hora de comunicar la sanción al conductor o
mala calidad de las imágenes que capturan la infracción. En cualquier caso, siempre
es mejor no cometer la infracción que tener que recurrir una multa.
