Todos los vehículos se clasifican según una escala
de seis niveles desarrollada por la Sociedad de Ingenieros
Automotrices (SAE), donde el nivel 0 es completamente manual y el
nivel 5 es completamente autónomo sin necesidad de intervención humana.
Ahora, por primera vez, ha salido a la venta un vehículo de nivel 3, aprobado
para circular por la carretera.
Casi un año después de que Mercedes-Benz recibiera luz verde
para vender vehículos equipados con su software de piloto automático,
denominado Drive Pilot, se informa de la venta de un vehículo con este nivel de
autonomía, según
información del Departamento de Vehículos Motorizados (DMV) de California.
La mayoría de los vehículos autónomos que circulan hoy en día
son de nivel 1 o 2. Esto significa que ofrecen funciones de “apoyo al
conductor”, que incluyen frenado automático de emergencia, advertencia de
punto ciego, centrado de carril y control de crucero adaptativo.
El vehículo autónomo de nivel 3 es un Mercedes Benz, aunque no
se sabe el modelo exacto, podría ser un EQS 2024 o un Clase S con tecnología
Drive Pilot que se activa si se cumplen ciertas condiciones, pero funciona
incluso en tráfico intenso y en viajes a menos de 70 km/h. El nivel 3 permite
que los conductores puedan concentrarse en otras actividades hasta que el
vehículo les avise para que retomen el control. La tecnología no funciona en
carreteras que no han sido aprobadas previamente por Mercedes.
Cierto es que hay “robotaxis” (de Waymo de Alphabet y Cruise
de GM) que operan en el nivel 4, lo que significa que se conducen de forma
autónoma en la mayoría de las condiciones sin interferencia humana. Pero estas
empresas actualmente no venden vehículos a los consumidores, y Cruise
recientemente canceló su servicio después de que el DMV de California
suspendiera su licencia debido a un incidente en el que un automóvil arrastró a
un peatón debajo de su carrocería durante casi 10 metros.
Los clientes estadounidenses pueden comprar una suscripción
anual de Drive Pilot por poco más de 2000 euros anuales. Por ahora, la circulación
solo será posible en California y Nevada, los únicos estados que han otorgado la
certificación a la empresa.
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El sistema está equipado con sensor LIDAR, radar, cámaras y
sensores ultrasónicos que detectan el entorno. A eso le suma mapas de alta
definición de la zona y sistemas de IA que actualizan lo que ocurre varios
kilómetros por delante. El sistema solo se puede activar si se cumplen todas
las condiciones y antes de hacerlo establecerá una distancia de seguridad con
el vehículo que nos precede y hay que confirmar, presionando una tecla, que
vamos a activar el sistema.
En caso de que el sistema necesite que tomemos el control y no
respondamos en 10 segundos, el vehículo activa las luces de seguridad y
comienza a reducir la velocidad hasta reducir completamente la marcha. Tampoco
se puede activar el sistema si en la carretera hay peatones o si se escuchan
sirenas (de ambulancias, policías o bomberos).
