Mimar al accionista es una de las prioridades de las cotizadas españolas y la primavera es una de las etapas tradicionales de reparto de dividendo. En las próximas semanas, alrededor de una docena de cotizadas premiará la fidelidad de sus inversores con un importe global que rondará los 15.000 millones de euros. El año pasado, entre abril y junio, las cotizadas españolas desembolsaron 11.800 millones de euros, según datos de BME.