La Comisión Europea no ve nada clara la absorción de Air Europa por IAG, grupo matriz de Iberia. Ni siquiera la ve tras las cesiones que le han planteado las aerolíneas implicadas. “Estos compromisos fueron considerados insuficientes”, señala el Ejecutivo comunitario, hasta el punto de que no ha discutido el asunto con otros “actores del mercado”, un paso habitual en estos procesos. Por eso, Bruselas ha concluido que la operación planteada “puede restringir la competencia […] en las rutas dentro de España, con destino a España y procedentes de España” y, a la postre, pueda elevar “los precios y disminuir la calidad de los servicios”.