Las elecciones autonómicas en País Vasco y en Cataluña dejará a las Cortes Generales sumidas en un periodo de parón durante casi tres meses. A la difícil aritmética con la que cuenta el Gobierno de coalición para desarrollar su plan legislativo, se le suma el contexto electoral que marcará la actividad política hasta después de las elecciones europeas.
El Ejecutivo busca orillar ese escenario y promete impulsar casi 200 leyes en 2024 con seis leyes orgánicas, 43 leyes ordinarias y 149 reales decretos. Un gesto con el que trata, a su vez, contentar a sus principales aliados en el Congreso de los Diputados, desde donde ya se le apremia a reactivar la agenda legislativa y a cumplir sus compromisos adquiridos para dar el «sí» a Pedro Sánchez en la pasada investidura. De momento, la única gran ley de la legislatura –y todavía no está aprobada– ha sido la ley de amnistía, que volverá al Congreso cuando el Senado la devuelva en mayo. Sobre ella ha versado todos los focos políticos y en el camino, si bien todos los aliados la han apoyado, con su aval han perdido, al mismo tiempo, rédito político de su apoyo al Gobierno. Más todavía tras la renuncia del Gobierno a presentar los Presupuestos tras el adelanto de elecciones en Cataluña. Los socios se han quedado sin rentabilizar sus principales exigencias
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En total, casi una treintena de leyes, están adormecidas. Doce proposiciones de ley, cinco de ellas motivadas por los socios del Gobierno de coalición y doce proyectos de ley —provenientes del Ejecutivo– ven retrasada su aprobación desde febrero, se encuentran en el cajón, a la espera de continuar su curso en la Cámara Baja y viendo como en comisión se prorrogan los plazos de enmiendas a la totalidad. Siete que vienen del Senado también acumulan parones.
Y el escenario para que estas leyes acaben en pleno todavía es lejano –deben pasar antes el filtro de las enmiendas al articulado antes de ser aprobadas definitivamente en pleno–. Las elecciones autonómicas en País Vasco, Cataluña y al Parlamento Europeo impactarán en el calendario legislativo. La semana del 15 de abril no habrá pleno por campaña electoral. Tampoco habrá pleno dos semanas consecutivas en mayo, ante el puente del Día del Trabajador y, a la siguiente, por las elecciones catalanas. En junio, la semana de campaña electoral europea impedirá la celebración de pleno. Los pactos postelectorales también pueden influir después en las alianzas en el Congreso y, por tanto, en la viabilidad de la legislatura. A la vez, este escenario, complica el calendario orgánico que el Gobierno prometió antes de Semana Santa.
De momento, ninguna de las previstas sale a pleno la próxima semana. En concreto, Sumar registró a principios de la legislatura una proposición de ley orgánica sobre la reforma del Código Penal para proteger la libertad de expresión y tiene un periodo de enmiendas hasta el día diez de abril. Ese mismo día vence una proposición de ley de reforma de la ley orgánica del Poder Judicial para la protección de los derechos humanos y la jurisdicción universal en España, también a propuesta de Sumar. La ley para mejorar la calidad de vida de personas con Esclerosis Lateral Amiotrófica (ELA) es una de las normas más difícil de aprobar, a pesar de contar con el consenso de todos los grupos. La última norma en este sentido la registró Junts. La proposición de ley orgánica del PSOE para prohibir el proxenetismo se atisba como un nuevo choque dentro del gobierno, y así, podría quedar en manos del apoyo del PP.
Otra de las promesas del PSOE al PNV era la de pactar una ley de secretos oficiales. PSOE y sus socios difieren en los plazos para la desclasificación de documentos y el plazo para presentar enmiendas a la totalidad continúa abierto. ERC registró una polémica ley para garantizar la autonomía de la voluntad de los y las deportistas en febrero, que ya se ha visto ampliada ocho veces.
Por parte del Gobierno, hay nueve proyectos de ley en plazo de enmiendas. Leyes que no cogen vuelo en el Congreso como la de familias, la de atención a la clientela, la de movilidad sostenible, o la de creación de la Oficina Española de Derechos de Autor y Conexos que lleva cinco semanas prorrogándose para su debate de totalidad. En plazo de enmiendas parciales se encuentra la ley de paridad, o la que creará la Agencia Estatal de Salud Pública, entre otras. Hay otros seis proyectos de ley que se encuentran a expensas de que la Comisión vote su informe, como el decreto «ómnibus» de medidas anticrisis para afrontar la guerra de Ucrania. Todavía tiene que volver al Congreso como proyecto de ley la reforma del subsidio del desempleo, decreto que fue rechazado por Podemos en enero. Otras leyes que tampoco cuentan con suerte en el Congreso de los Diputados son la nueva ley de deportes, la de agentes forestales o la de bomberos.
