Acabada la Semana Santa, vamos a hacer como Poncio Pilatos. No lavarnos las manos, sino, como era costumbre en la época, indultar a un preso para la Pascua judía. Y voy a defender el perdón para dos de las políticas más criticadas el último mes: Ayuso y Armengol, cuya “dimisión inmediata” piden la izquierda y la derecha, respectivamente.