El campo y el Gobierno empiezan a enterrar las hostilidades. Dos días después de que el Ministerio de Agricultura, Ganadería y Pesca anunciara una batería de 43 medidas para aliviar la situación del sector, la Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos (UPA) ha dado el visto bueno al acuerdo. De esta manera, una de las tres principales asociaciones del sector pone punto final a las reivindicaciones enfocadas en exigir mejores condiciones para el campo.
Upa, el brazo sindical del campo
UPA, con cerca de 80.000 afiliados, es la más pequeña de las tres grandes siglas agrarias en España —Asaja tiene 200.000 afiliados; y COAG, 150.000—. También es la que tradicionalmente se sitúa más a la izquierda en el espectro ideológico. Está vinculada a UGT y su secretario general, Lorenzo Ramos, agricultor de Valdelacalzada (Badajoz), forma parte del comité confederal de este sindicato.