Sudó de lo lindo el Unicaja, campeón de la fase regular, para cogerle el hilo al duelo y retorcerlo en el último cuarto, justo cuando hablan los buenos. Penalidad para el Manresa, equipo modesto dirigido por Pedro Martínez que plantó cara para certificar que no celebra cada victoria como inesperada sino como reveladora. En Málaga, sin embargo, le sobró el epílogo.
UNICAJA, 87 – MANRESA, 79
Unicaja: Díaz (6), Ejim (9), Kalinoski (11), Barreiro (9) y Kravish (10) –quinteto inicial–; Osetkowski (6), Taylor (8), Carter (7), Djedovic (4), Lima (0), Thomas (9) y Sima (8).
Manresa: D. Pérez (0), Badio (8), Sagnia (4), Robinson (15) y Geben (6) –quinteto inicial–; Williams (6), D. García (6), Taylor (5), Steinbergs (11), Vaulet (6) y Oriola (12).
Parciales: 18-24, 16-16, 18-16 y 35-23.
Árbitros: Juan Carlos García, Martín Caballero y Francisco Araña. Sin eliminaciones.
Martín Carpena. Unos 11.000 espectadores.