El Tribunal Supremo (TS) ha admitido a trámite un recurso de casación de la Fundación Hay Derecho contra la resolución de la Audiencia Nacional que inadmitía el recurso por el nombramiento de Mariano Bacigalupo como consejero de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) por falta de legitimación activa. Bacigalupo es el marido de la ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, Teresa Ribera.
La Fundación Hay Derecho fue la que logró que el Supremo anulara el nombramiento de la política socialista Magdalena Valerio como presidenta del Consejo de Estado en noviembre de 2023 por no cumplir con el requisito de ser una “jurista de reconocido prestigio”, tal como exige la ley.
En el caso de Bacigalupo, la organización presentó un recurso contencioso-administrativo en noviembre de 2022 contra el nombramiento del marido de la ministra Ribera como consejero de la CNMV, tras haber cesado en su cargo como consejero de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC). La argumentación es similar, ya que para ocupar este cargo, según el Real Decreto Legislativo 4/2015, de 23 de octubre, se requiere contar con una “reconocida competencia en materias relacionadas con el mercado de valores”.
Tal como argumenta la organización, como profesor de Derecho administrativo, Bacigalupo “no parece demostrar la existencia de la mencionada competencia”. Además, el hecho de que estuviera próximo a finalizar su mandato en la CNMC, un organismo regulador con funciones no directamente relacionadas con las de la CNMV, reforzaba este argumento.
En el caso de la CNMC, donde Bacigalupo concluye su mandato, los miembros del Consejo, incluyendo al presidente y al vicepresidente, son designados por el Gobierno, a propuesta del ministro de Economía y Competitividad, entre individuos de reconocido prestigio y competencia profesional en el ámbito de actuación de la Comisión que, según la ley, consiste en preservar y promover la competencia efectiva en todos los mercados y sectores productivos en beneficio de los consumidores y usuarios.
Tras un mandato que expiraba
Aunque la fundación reconoce que no siempre se han nombrado para la CNMC y la CNMV a personas con la competencia reconocida tal como lo exigen sus normas reguladoras, “este caso representa un salto inusual: de un organismo regulador con un mandato próximo a expirar a otro organismo regulador con un mandato completo por delante”. Además, pone el acento en el vínculo matrimonial entre el candidato y una ministra del Gobierno, Teresa Ribera, “lo que sugiere la necesidad de precaución para evitar posibles conflictos de intereses”.
A pesar de ello, la Audiencia Nacional consideró entonces que la Fundación Hay Derecho carecía de legitimación activa para recurrir este nombramiento. Para la organización, esto podría implicar “que nadie pueda solicitar la revisión jurisdiccional de este tipo de nombramientos debido a las escasas posibilidades de que alguien directamente afectado pueda recurrirlos, tanto por razones personales como profesionales”.
Sin embargo, el Supremo reconoció la legitimación activa de esta organización en la sentencia en la que anulaba el nombramiento de Valerio y estimó el recurso. De este modo, según declara la fundación, se crea “un precedente que puede contribuir a que también se acepte la legitimación en este caso”.
