Las nuevas reglas fiscales europeas buscan que los Estados miembros vuelvan a la senda de control del gasto público tras la montaña de deuda generada por las crisis sistémicas, primero, y la pandemia de covid-19 como colofón. Pero el acuerdo político alcanzado en febrero entre el Consejo y el Parlamento Europeo, tras intensas negociaciones, y que deberá ser ratificado a lo largo de este mes, hará que numerosos países, entre ellos España, no sean capaces de cumplir sus objetivos climáticos y sociales, advierte un estudio de la Confederación Europea de Sindicatos (ETUC).