Los hogares españoles van a experimentar un incremento de sus ingresos en 2024 y 2025, pero ese aumento nominal (sin tener en cuenta la inflación) no va a contribuir a paliar los problemas de acceso de la vivienda de muchas familias. Estos van a “persistir”, según el último análisis sobre el mercado hipotecario de Fitch, porque las ganancias de los hogares “serán a grandes rasgos similares a la evolución de precio de las casas”. La agencia de calificación calcula que, de media, los importes de las viviendas en España seguirán multiplicando por 5,5 los ingresos brutos medios de los hogares, una manera de medir la asequibilidad. Y avisa de que esa proporción es de casi ocho veces “en las grandes áreas metropolitanas”.