No es un tópico decir que a veces la realidad supera la ficción. Es lo que pudimos constatar en el canal temático del PSOE. El Consejo de Administración de RTVE perpetró un esperpéntico golpe de Estado. La presidenta interina, Elena Sánchez, destituyó al director de Contenidos, José Pablo López, un profesional muy cualificado que ha ocupado importantes responsabilidades en televisiones como Trece TV, La Sexta o Telemadrid. Hacía tiempo que estaban enfrentados y el Consejo apoyó la propuesta, pero al poco cesó a la presidenta interina. José Miguel Contreras, el hombre fuerte del sanchismo mediático que controla con mano férrea, también, El País y la Ser, no se iba a quedar quieto. La izquierda considera que es la propietaria de TVE y RNE, ya que tienen que ser los altavoces del sanchismo y un negocio para sus bolsillos. Hay que recordar que la productora de Prisa está entre las 10 que más facturan al ente público. Hay mucho dinero y poder en juego para que Contreras permita un atisbo de independencia. RTVE es una pieza fundamental en la estrategia al servicio de Pedro Sánchez. La han convertido en un canal temático de La Moncloa.
Hace muchos años que pienso que RTVE se tendría que cerrar. No tiene ninguna utilidad, salvo pagar las nóminas de una plantilla sobredimensionada y de una pléyade de colaboradores del régimen sanchista. No cumple ningún requisito de servicio público, salvo que se entienda que lo es actuar como el botafumeiro de Sánchez y las redes clientelares del PSOE. Es un gran negocio para las productoras, como sucede con Prisa, que se reparten centenares de millones al año. Hace que sus propietarios sean muy ricos y puedan colocar en sus programas a muchos amigos del poder. Cuando gobierna el PP siguen forrándose, porque el centro derecha es tan cobarde como acomplejado. Nadie ha conseguido que deje de ser una trituradora de dinero, que exista un proyecto de servicio público y sea un instrumento que promocione la cultura como sucede con la BBC. Por supuesto, todo seguirá igual. Sánchez destituida tras cargarse a un buen profesional como López, Contreras y sus amigos obteniendo beneficios fabulosos y el sanchismo mantiene su canal temático.
Francisco Marhuenda es catedrático de Derecho Público e Historia de las Instituciones (UNIE)
