Las estaciones invernales dependientes de la Diputación de
León -San Isidro y Valle Laciana-Leitariegos- cerraron la campaña 2023-2024 con
un total de 86.823 esquiadores recibidos en una temporada marcada por una
meteorología adversa para la práctica del esquí. Estas cifras, que se sitúan
por debajo de los más de 100.000 usuarios de las mejores temporadas, sí superan
en número de esquiadores e ingresos la temporada de la pandemia, así como las
de los años 2015-2016 y 2016-2017
De los 129 días de apertura contemplados inicialmente en el
calendario oficial, la falta de nieve no permitió el inicio de la campaña hasta
bien entrado el mes de enero. Posteriormente, las precipitaciones se produjeron
de forma irregular, de modo que las instalaciones de San Isidro prestaron
servicio 76 días y las de Valle Laciana-Leitariegos lo hicieron durante 60
jornadas. El promedio de días de funcionamiento de los últimos diez años es de
más de 90 días.
A la escasez de nieve hay se sumaron varias jornadas de
vientos fuertes que impidieron la puesta en marcha por motivos de seguridad de
los telesillas y las altas temperaturas que dificultaron la fabricación de
nieve artificial para mantener las pistas en unas condiciones óptimas, aunque
en San Isidro, por ejemplo, se llegó a aportar más de medio metro de nieve
fabricada.
El promedio de kilómetros esquiables de las estaciones
durante este año fue de 6,6 kilómetros en San Isidro, con capacidad total de 34
kilómetros, y 4,1 en Valle Laciana-Leitaregos, de un total de ocho kilómetros.
Pese a ello, las estaciones leonesas aportaron la mejor oferta de nieve
continuada del Cantábrico, ya que el resto de las de la Cordillera y del
Sistema Central estuvieron cerradas o con una oferta simbólica.
Por estaciones, San Isidro recibió un total de 58.436
esquiadores y Valle Laciana-Leitariegos 28.387. En las dos instalaciones, día
de mayor afluencia de público fue el 16 de marzo, cuando la primera recibió
3.705 usuarios, mientras la segunda acogió 1.309. La media de asistencias se
situó durante esta temporada en 790 en el caso de San Isidro y en 473 en Valle
Laciana-Leitariegos, siendo la procedencia predominantemente en ambos casos de
León, Asturias, Galicia y Portugal.
En cuanto al número de abonos anuales de esta temporada, en
el caso de San Isidro ascendió hasta los 2.195, alcanzando una cifra de venta
de forfaits de 42.834. En la Estación de Valle Laciana-Leitariegos, los abonos
anuales fueron 539 y la venta de forfaits, 15.638. Esas cifras, junto a las de
alquiler de esquís y concesiones, suponen unos ingresos, a falta del balance
definitivo, que no alcanzarán los dos millones de euros, de los que 1,3
corresponderían a San Isidro.
El diputado de Turismo, Octavio González, precisó que se
trató de una temporada “atípica” y marcada por una meteorología inestable que,
sin embargo, permitió registrar la mejor Semana Santa de los últimos cinco
años. González destacó que se aprovecharon “al máximo” los recursos disponibles
en unas circunstancias meteorológicas adversas y se quedó con el hecho de que
“las estaciones de esquí de la Diputación de León suponen uno de los
principales activos turísticos de la provincia durante la campaña de invierno”.
Octavio González agradeció el trabajo del personal de las
estaciones y de las empresas y profesionales que prestan servicios en ellas y
recalcó la importancia de estas instalaciones invernales para la economía de
las áreas de influencia en las montañas central y occidental leonesas. Además,
avanzó que ya se empieza a preparar la próxima temporada para que las
estaciones estén “listas” y recordó la “importante” inversión que se va a
efectuar en las instalaciones de Valle-Laciana Leitariegos, cifrada en más de
diez millones de euros, informa Ical.
