La última encuesta del CIS, que encumbra al PSOE tras el periodo de reflexión del presidente del Gobierno, ha puesto en alerta a los socios más próximos al Ejecutivo. La última encuesta del Centro de Investigaciones Sociológicas, que dirige el socialista José Félix Tezanos, disparó a los socialistas nueve puntos por encima del PP e incluyó preguntas tendenciosas que buscaban avalar al Ejecutivo.
Algo que ha causado estupor entre los socios habituales del Gobierno, sobre todo, de los que comparten asiento en el Consejo de Miniestros. Sumar ha reconocido este martes que le cuesta entender las decisiones de la institución e incluso, ha insinuado, que existen estrategias tactitistas tras él. El portavoz de Sumar en el Congreso de los Diputados, Íñigo Errejón, preguntado por la última encuesta ha reconocido que el CIS “hace tiempo que toma decisiones que resultan muy extrañas a la sociedad científica”. A su juicio, realiza “encuestas e incluye preguntas atípicas para la comunidad científica”. Una de esas preguntas, hacía referencia sobre sí está “justificado” o es “solo una manera de meterse con Pedro Sánchez” la apertura de una causa judicial por una denuncia particular contra la esposa del presidente del Gobierno. El CIS también preguntaba sobre si la Justicia en España “actúa siempre de forma imparcial o en ocasiones se ve influida por otros poderes políticos o económicos”. Según el portavoz de Sumar a la mayoría de la comunidad científica “les cuesta entender” estos barómetros.
A estas críticas se sumó el portavoz de los comunes y secretario segundo en la mesa del Congreso, Gerardo Pisarello, quien alertó del “enorme error” que puede existir ante la “tentación” del presidente del Gobierno, del PSOE o de “instituciones afines al PSOE” de tratar de darle al periodo de reflexión del presidente del Gobierno “una salida tacticista o electoralista”. En Sumar temen ya una operación que busque por parte del PSOE aglutinar el voto de izquierdas en la papeleta socialista y es por eso que para evitar esa imagen electoralista, piden “cambios” no de partido, sino para que “mejore la democracia para todos”.
