En el barrio de Chueca, en el centro de Madrid, un autobús turístico de la compañía Big Bus quedó atrapado mientras intentaba maniobrar en una de las estrechas calles de la zona. El incidente, que ocurrió alrededor de las 20h del domingo, dejó estupefactos a vecinos y transeúntes que presenciaron cómo el vehículo ocasionaba varios desperfectos en su intento por girar en la calle. El autobús impactó contra algunos cables y llegó incluso a doblar la reja de un balcón en el primer piso de una vivienda cercana.
La Asociación de Vecinos de Chueca denunció rápidamente el incidente a través de las redes sociales, compartiendo videos que mostraban la difícil situación desde diferentes ángulos. En las grabaciones se puede apreciar cómo el autobús intenta liberarse del atasco, mientras se escuchan golpes y ruidos de daños materiales. Finalmente, tras varios intentos, el vehículo logra retroceder por la calle San Bartolomé hacia la plaza Pedro Zerolo y Gran Vía para salir del lugar.
La asociación lamentó lo ocurrido, criticando la invasión del turismo en el barrio y cuestionando cómo un autobús de tales dimensiones pudo circular por calles tan estrechas, especialmente considerando que la ruta de la empresa no incluye el recorrido por Chueca.
El Ayuntamiento de Madrid ha abierto un expediente informativo a la compañía de autobuses. Borja Carabante, delegado de Urbanismo, Medio Ambiente y Movilidad, ha declarado a la prensa que esa ruta no estaba autorizada: “No tenía autorización para prestar el servicio de bus turístico en esa calle y en esa zona y, por tanto, lo que hemos abierto es un expediente informativo para conocer por qué circulaba por ahí, bajo qué condiciones y, a partir de ahí, veremos cuáles son las medidas a adoptar”, explicaba. Aparte de la eventual multa, también será necesario aguardar a que el expediente informativo se cierre para determinar los perjuicios ocasionados por el autobús en el patrimonio público de la ciudad y en algunos escaparates.
