“Seis sacerdotes kenianos murieron y varios más resultaron heridos en un bombardeo perpetrado por combatientes de Al-Shabaab contra una reunión de sacerdotes que trabajaban para difundir la cristianización en la ciudad de Dubli, estado de Bajo Juba , en el sur de Somalia”.
Al-Shabaab, la franquicia de Al Qaeda en Somalia, se apunta a la estrategia del Estado Islámico (Daesh, Isis) en África, dentro del plan global de genocidio contra los cristianos. En su momento, se conoció un documento atribuido a Al Qaeda Central (AQC) en el que se desaconsejaban los ataques a otras confesiones –los judíos son un objetivo permanente—y la actuación de la banda, en esto no se puede generalizar, ha estado muy alejada de las prácticas genocidas de Isis.
El ataque protagonizado por los yihadistas somalíes se convierte en un hecho preocupante ya que, por la justificación que dan los terroristas, no va a ser el último en tanto en cuanto de lo que se trata es de evitar la expansión del cristianismo, en este caso en la zona de influencia de Al-Shabaab.
