La campaña de la Declaración de la Renta inició hace unos días, marcando el comienzo de un período en el que más del 90% de los contribuyentes optarán por presentar sus declaraciones de forma electrónica, utilizando los servicios proporcionados por la Agencia Tributaria o asesores fiscales privados. A pesar de la comodidad que ofrece esta modalidad, también conlleva riesgos adicionales relacionados con la ciberseguridad.
Entre los riesgos más comunes se encuentran las técnicas de suplantación de identidad, como el phishing y el smishing. Estas tácticas se basan en el envío masivo de correos electrónicos y mensajes de texto que aparentan ser de la Agencia Tributaria, ofreciendo reembolsos y devoluciones de impuestos falsos para engañar a los contribuyentes y obtener información personal y bancaria. Por ejemplo, podrían recibir un mensaje falso que les insta a hacer clic en un enlace para reclamar un reembolso ficticio de impuestos.
Otro riesgo importante radica en el uso de aplicaciones móviles fraudulentas que imitan la interfaz de la aplicación oficial de la Agencia Tributaria. Estas aplicaciones engañosas pueden pasar desapercibidas en las tiendas de aplicaciones legítimas como Google Play y solicitar datos confidenciales a los usuarios, poniendo en peligro su seguridad financiera.
Para evitar caer en estas trampas, es crucial que los contribuyentes estén atentos a las señales de advertencia y sigan las pautas de seguridad recomendadas. Por ejemplo, la Agencia Tributaria nunca solicitará información personal o bancaria a través de correos electrónicos no solicitados o mensajes de texto. Además, la institución ya cuenta con la información de los contribuyentes en su base de datos y no requerirá que se la proporcionen nuevamente.
Es importante que los contribuyentes estén informados sobre los riesgos asociados con la presentación electrónica de la Declaración de la Renta y tomen medidas proactivas para proteger su información personal y financiera durante este período.
Además, es aconsejable mantener el software de seguridad actualizado en todos los dispositivos y utilizar contraseñas seguras para acceder a los servicios online. Asimismo, es recomendable verificar la autenticidad de cualquier comunicación recibida de la Agencia Tributaria antes de proporcionar información confidencial.
