¿Crees que podrías ser adicto a los videojuegos? Descubre los tres criterios de la OMS

¿Crees que podrías ser adicto a los videojuegos? Descubre los tres criterios de la OMS

Se entiende como adicciones a aquellos hábitos que, impactando
negativamente en la salud física, mental y emocional de la persona,
obstaculizan la voluntad del individuo y anulan su capacidad para tomar la
decisión consciente de abandonar dicho hábito. Las adicciones empezaron a ser
catalogadas como enfermedades por la Organización Mundial de la Salud desde
hace más de dos décadas. Y poco a poco cada vez son más las adicciones
reconocidas por el propio organismo.

La decisión de catalogar las adicciones como enfermedades en
la lista oficial siempre ha generado un gran debate, el cual persiste hasta la
actualidad. Numerosos profesionales de la salud sostienen que esta
clasificación responde más a una necesidad de la Organización Mundial de la
Salud de proporcionar una respuesta (sea esta acertada o no) a la preocupación
y alarma social generada por este tema, más que a un criterio médico
fundamentado.

¿Eres adicto a los videojuegos?

La adicción a los videojuegos fue oficialmente reconocida y
catalogada como tal en el año 2022, momento en el cual se incluyó por primera
vez en la Clasificación Internacional de Enfermedades. Aunque, contrariamente a
lo que se podría pensar, no todas las personas que dedican numerosas horas a
los videojuegos son consideradas adictas por la Organización Mundial de la
Salud. Según las estimaciones de la propia OMS, basadas en sus propios
criterios, solo un 0,3% a 0,1% del colectivo de la llamada “comunidad gamer”
podría ser categorizado como verdaderamente adicto.

Esto sucede porque la Organización Mundial de la Salud fundamenta
sus criterios no en la cantidad de horas dedicadas a los videojuegos, sino en
el grado en que esta actividad interfiere con otras facetas de la vida. Para un
diagnóstico formal de adicción a los videojuegos, un individuo debe manifestar
los siguientes tres indicadores:

Pérdida de control al jugar a un videojuego. El afectado no
es capaz de detenerse o limitar su tiempo de juego, incluso cuando es
consciente de que está invirtiendo un tiempo excesivo en esta actividad.Priorizar los videojuegos sobre el resto de su vida, hasta
el punto de aislarse y perder interés en otras actividades que antes
disfrutaba. Los videojuegos se convierten, así, en la actividad principal,
dejando de lado todo lo demás.Cuando los efectos negativos del uso ininterrumpido de
videojuegos acaban afectando a otros ámbitos, como el laboral, el escolar y el
sentimental o familiar, el afectado es incapaz de dejar de jugar y redirigir su
atención hacia esas áreas.

Leave a Reply

Your email address will not be published. Required fields are marked *