El presidente de Canarias, Fernando Clavijo, ha reconocido este lunes “las debilidades” del sistema económico del archipiélago y ha asegurado que “las cosas tienen que cambiar” y que hay que revisar y “resetear” el modelo turístico. Este sábado, cerca de 60.000 personas salieron a la calle en las siete islas canarias para exigir una transformación de un sector que consideran “depredador” y que está poniendo en aprietos a buena parte de la población, sobrecargando las islas, provocando graves consecuencias sociales, laborales y ambientales, además de agravar el problema de la vivienda. Las organizaciones reclamaron, además, una moratoria que suspende la autorización de nuevas plazas hoteleras y pisos vacacionales, una ecotasa y la regulación de la compra de vivienda por parte de extranjeros.