Almuñécar era la antigua Sexi, un enclave fenicio. Sexi, Seksi, Sexsi, Sexs, Secks, Eks o Ex es la denominación de la colonia fenicia que protagonizó los primeros contactos con los pueblos indígenas de la península, según las fuentes griegas recogidas por Estrabón. Como el alfabeto fenicio no tenía vocales, el nombre del asentamiento enlatín era “SKS”, que derivó en “Sex”. Así, los de Almuñécar son ‘sexitanos’ además de ‘almuñequeros’, aunque este gentilicio es menos habitual. Como curiosidad, Almuñécar tiene un Parque Loro Sexi. También cuenta con playa y con restos romanos visitables a apenas una hora de Granada.
En Almuñecar, “el Acueducto y las Termas Romanas dan testimonio de una majestuosa obra que, en la antigüedad, captaba agua y la derivaba a la ciudad. Comienza el ingenio en la zona conocida como Las Angusturas, en el río Verde, donde se ha documentado una captación de aguas, un canal abovedado con una longitud que se aproxima a los 500 metros”, señala Turismo de la Junta de Andalucía.
Del Acueducto de Torrecuevas se puede apreciar varios tramos. “El I es el de mayor longitud, con 17 arcos de luz normal y otros dos de luz reducida que flanquean a uno normal. Cuando la conducción cambia de cuenca, a la del río Seco a través de un túnel, pasa a salvar 3 barrancos mediante sus respectivos acueductos”, continúa la reseña de la Junta.
“El Acueducto IV, con unos 72 metros de longitud, es el más espectacular. Está formado por dos cuerpos con nueve arcadas principales flanqueadas por dos de luz secundaria y dos registros muy cercanos a ambos extremos. Cuando finaliza éste, la canalización desemboca en un pozo de registro cuadrangular, único en el recorrido, pues el resto de los que se han documentado son circulares”, indica.
“El último tramo, ya en la ciudad, busca el casco antiguo, es el llamado de La Carrera. Junto al mismo, se ha documentado un importante complejo hidráulico compuesto por unas Termas y una serie de estructuras de habitación fechadas hacia el último cuarto del siglo I d.C. las Termas están formadas por varias piscinas, tanto de agua fría como caliente, con los restos del hipocausto y el horno, además de una red de tuberías realizadas en plomo (están soterradas para su conservación)”, recoge Turismo de Andalucía.
El conjunto se ha fechado desde mediados del siglo I d. C. hasta el siglo III o incluso IV d. C., cuando se abandonaron la mayor parte de las dependencias.
También cuenta con la Factoría de salazón “El Majuelo”. Según el Consistorio, “esta factoría de salazón de pescado se encuentra en el interior del Parque Botánico del Majuelo y es uno de los yacimientos arqueológicos más importantes de Almuñécar. Encontramos un conjunto de restos que permiten imaginar la grandeza del pasado de esta ciudad. El templo dedicado a la diosa Minerva, las canalizaciones de agua procedentes del acueducto o las piletas donde se realizaba la salazón de pescado y el garum sexitano. Este producto era considerado un manjar y era alabado por sus propiedades, calidad y sabor exquisito”.
“Se emplaza junto a la ladera oeste del Cerro de San Miguel donde se ubica el casco antiguo de Almuñécar, que en la antigüedad se comunicarían por un acceso escalonado, cuyos restos aún hoy pueden observarse al noreste del conjunto. También se documentó un muelle de amarre de época romana y de este yacimiento proceden numerosas muestras de la cultura material sexitana expuesta en los museos locales y en el Museo Arqueológico y Etnológico de Granada”, continúa el Consistorio.
