Las autoridades ya han decidido el destino de los 69 bolivianos que viajaban, con visados falsos, en un crucero de placer que atracó el martes por la mañana en el puerto de Barcelona. Después de dos días con la embarcación retenida en la terminal C de cruceros, este jueves por la mañana ha empezado el desembarco de esos viajeros, que serán sometidos a un proceso administrativo para su deportación, con cargo a la compañía, a Bolivia. El MSC Armonía, por su parte, zarpará con el resto de los 1.500 pasajeros a partir de mediodía y seguirá su ruta, que culminaba en Venecia, según el acuerdo alcanzado entre las partes implicadas que ha podido conocer EL PAÍS.
La Policía inicia los trámites para deportar a los 69 bolivianos del crucero, que saldrá del puerto de Barcelona y seguirá su ruta
