Más es más: Adiós a Roberto Cavalli, el diseñador del lujo excesivo

Más es más: Adiós a Roberto Cavalli, el diseñador del lujo excesivo

El icónico Roberto Cavalli ha perdido la vida este viernes 12 de abril a los 83 años de edad, tras presentar batalla contra una larga
enfermedad. Ahora, el mundo de la moda está de luto, pero también celebra su fructífera
y peculiar vida. El diseñador italiano, nacido en Florencia el 15 de noviembre
de 1940, llegó al seno de una familia de marcada tradición artística, lo que le
permitió desarrollarse profesionalmente hasta convertirse en leyenda ya desde
los años 90. Lo hizo gracias a su peculiar forma de entender y reinventar la
moda, bajo el lema personal de que “más es más”, haciendo del exceso su seña de
identidad. Y es que la ostentación le definía, sin renunciar a la elegancia que
logró que su firma se convirtiese en imperio, al ser muy cotizada por las altas
esferas italianas y de medio mundo, que caía rendido ante sus exóticas
creaciones donde los estampados jugaban un papel protagonista.

Considerado rey de los prints felinos, una de sus
debilidades, comenzó a experimentar en el mundo del arte siguiendo los pasos de
su abuelo, pintor de profesión. Así, se matriculó en la escuela de arte, aunque
pronto comenzó a derivar su pasión a la moda, utilizando como lienzo las telas
que después dejaban boquiabiertos a todos sobre las pasarelas. Con 30 años
comenzó a presentar sus propuestas, pero no fue hasta la década de los 90
cuando consiguió hacerse un nombre propio.

Lo hizo gracias a la sensual ostentación que marcaban sus
diseños, lo que dejó huella en alfombras rojas, las fiestas más exclusivas y
vistiendo a las celebridades del momento que no se conformaban con ir elegantes
a un sarao sino, sobre todo, hacerse notar y acaparar todos los flashes. Con él
firmando sus exuberantes outfits el éxito estaba asegurado. Incluso las Spice
Girls confiaron en él en 2008 para su regreso a los escenarios, lo que fijó en
su firma todas las miradas, aunque en 2015, en un proceso de restructuración
tras vender la firma, la dirección creativa de la marca pasaba a manos de Peter
Dundas, tras ser adquirida por el fondo de inversión italiano Clessidra. No
duró más de dos años en el puesto, pues se alejó del glamour que definía la
compañía con sus trajes de noche con transparencias y generosos escotes, sus
pieles y bordados, a lo que le sustituyó después Peter Surridge en 2017.

Roberto Cavalli, exceso también en el amor

En marzo del año pasado Roberto Cavalli volvió a copar miles
de titulares por todo el mundo, aunque nada tenía que ver con su faceta
profesional. Lo hacía por convertirse en padre por sexta vez del pequeño
Giorgio a los 82 años, fruto de su romance con Sandra Nilsson-Bergman, quien
fuese playmate sueca y con el que se llevaba 40 años de diferencia. Pero el
afamado diseñador italiano ya había formado antes familias, como así hizo con
su primera esposa Silvanella Giannoni, con la que tuvo a sus hijos mayores,
Tommaso y Cristina. El amor en este matrimonio perduró durante diez años,
firmando el divorcio en la década de los 70.

Después comenzó un discreto romance con Eva Düringer, quien
fuese miss y uno de sus iconos, hasta que en 1980 pasó a convertirse en su
esposa, además de madre de sus otros tres hijos: Roberto, Rachele y Daniele. Fue
firmar los papeles del divorcio de Eva y aparecer en su vida en 2010 la
jovencísima Sandra, madre de su último vástago. Parece que la modelo le enamoró
como ninguna otra, como así se lo demostró al regalarle por su quinto
aniversario una isla privada en aguas suecas, frente a la costa de Strängnäs, a
la cual bautizó como Stora Rullingen. Se gastó para su romántico gesto más de
dos millones de dólares –su fortuna está valorada en 600 millones de dólares-,
en uno de sus infinitos alardes de ostentación y exuberancia que no solo
mostraba sobre las pasarelas con sus icónicos diseños que le convirtieron en
referente de la moda italiana desde los años 90.

Sus negocios más allá de la moda

Tras amasar una gran fortuna durante sus años dorados, quiso
demostrar su poder no solo en las pasarelas y las grandes citas de la moda o
las fiestas repletas de estrellas. También en los mares, surcándolos a bordo de
un yate que, a golpe de vista, tan solo podría ser suyo. Y es que el print
animal que marcaron sus creaciones de moda también era protagonista de su
superyate de 27 metros de eslora, diseñado en colaboración con Tommaso
Spadolini. Se trata de una embarcación exclusiva y no porque alcanza los 40
nudos de velocidad gracias a sus tres potentes motores, sino también por su
estudiada decoración donde el estampado de leopardo le hace inconfundible.

Pero la fortuna de Roberto Cavalli no solo se explica por su
privilegiada posición en la moda, sino también por saber sacar rentabilidad a
su nombre más allá. Así, en 2014, un año antes de vender su firma, levantó en
el corazón de la isla de Ibiza su último restaurante de lujo bajo el sello ‘Restaurant
& Lounge Cavalli’. Con 2.000 metros cuadrados hizo las mieles de los
paladares más exquisitos y los bolsillos más holgados, con una propuesta
gastronómica que traía los sabores de la toscana a la isla balear, mientras
estimulaba todos los sentidos gracias también a la cuidada decoración. No era,
ni mucho menos, su primera aventura en el mundo de la restauración, pues antes
abrió el Cavalli Caffè en Florencia y Saint-Tropez, además de aquellos que
triunfan en Kuwait, Beirut, Dubai y Nueva Delhi.

Leave a Reply

Your email address will not be published. Required fields are marked *