Noboa mide su popularidad con un referéndum de 11 preguntas sobre seguridad

Noboa mide su popularidad con un referéndum de 11 preguntas sobre seguridad

El presidente de Ecuador, Daniel Noboa, había dicho que la aprobación era fundamental para continuar su política de máxima acción de seguridad. Este domingo, los ecuatorianos han tenido la oportunidad de decidir si respaldan o no los postulados del mandatario en una consulta popular de 11 preguntas, que también sirvieron de termómetro del apoyo popular del gobernante.

Es la tercera cita electoral en el país en poco más de un año. Además de las presidenciales adelantadas que ganó Noboa, también hubo una consulta convocada por el expresidente Guillermo Lasso –y perdió, sellando su destino político– y otra por asuntos ambientales a propósito de la explotación petrolera.

En esta oportunidad, Noboa buscaba respaldo para su política de «combate al narcoterrorismo», así como nuevas formas de atraer inversiones al país. El presidente dijo que una aprobación de las 11 preguntas abriría la puerta a mayor estabilidad, y hasta hace algunas semanas parecía imbatible y destinado a un triunfo aplastante. Pero las complicaciones de seguridad y los apagones ocurridos en Ecuador en los últimos días pueden haber bajado el entusiasmo.

Ecuador ha sufrido cortes no programados de electricidad en distintas provincias, y el Gobierno admitió que Colombia dejó de venderle energía. Además, Noboa afirmó que hubo sabotajes a las centrales hidroeléctricas del país y que sus opositores exageraron la dimensión del problema para perjudicarlo a él y a la propia consulta popular.

Por otra parte, el país andino vive una crisis de seguridad y violencia, especialmente en las provincias costeras, por una guerra abierta con bandas criminales que Noboa declaró «terroristas» cuando impuso el conflicto armado interno, ya vencido. Durante ese tiempo, dos alcaldes fueron asesinados a tiros y, aunque la Policía Nacional asegura que las muertes violentas han reducido 18 % desde el inicio de la emergencia, las extorsiones y secuestros han aumentado especialmente en Guayaquil, punto fuerte del narcotráfico en el país, aumentando cinco veces en el primer trimestre con respecto a 2023. Además, el asalto policial a la Embajada de México en Quito para capturar al exvicepresidente Jorge Glas le hizo llover muchas críticas.

«Hoy es el día en el que sepultaremos a un viejo país de violencia, angustia y pobreza», dijo Noboa en la inauguración de la jornada. Llamó a sus compatriotas a «hacer historia» en lo que calificó como la consulta de mayor significado que ha ocurrido en Ecuador. Más tarde, al momento de votar, lo hizo en menos de un minuto y en medio de un fuerte dispositivo de seguridad.

La presidenta del Consejo Nacional Electoral, Diana Atamaint, dijo que se había dispuesto la organización para más de 13 millones de electores. «Los ecuatorianos estamos unidos para enfrentar con determinación la inseguridad, violencia política y la corrupción que tanto daño le han hecho a nuestro país. Debemos acudir a las urnas y ser parte del cambio a través de nuestro voto», añadió.

Cinco de las preguntas planteadas implican cambios constitucionales; el resto, implicaciones legales de menor grado. Entre los asuntos que estaban en juego se incluyeron la aprobación de que las Fuerzas Armadas apoyen a la Policía Nacional en el combate al crimen organizado, que los militares hagan controles permanentes en las vías, incrementar las penas por terrorismo y narcotráfico, entre otros delitos, permitir la extradición de ecuatorianos y reconocer el arbitraje internacional para dirimir controversias financieras, entre otras.

Ecuador iba a media jornada electoral. Pensada para cerrar mesas electorales a las 5:00 de la tarde, hora local, la consulta generaría el escrutinio de cada pregunta pues su ámbito de aplicación varía. De ser aprobadas todas, algunas entrarían en vigor de inmediato, otras en 30 días y algunas más en 65 días debido a reformas legislativas pendientes. Alguna de las disposiciones le brinda a la Asamblea Nacional un periodo de hasta 200 días para adaptar el marco jurídico.

Los electores que acudieron a votar lo hicieron bajo la lluvia y con ritmo regular. En algunos centros electorales de la capital hubo aglomeraciones, pero en general el proceso fluyó rápido. Las personas llegaban con sus respuestas ya decididas. Pocos se detenían a leer de nuevo las largas preguntas y considerandos particulares para ellas.

El voto en bloque por las preguntas podía abrir la puerta a que esta vez sí se aprobara la extradición de ecuatorianos a otros países, para lo cual se requiere modificar la constitución. Ya lo había intentado el expresidente Guillermo Lasso, sin éxito.

Noboa asumió el poder el pasado noviembre tras ganar unas elecciones por sorpresa. Está llamado a completar el mandato que dejó su antecesor Guillermo Lasso, que convocó unas generales antes de enfrentarse a ser destituido por el Congreso. Su aspiración es presentarse a un periodo completo a partir de 2025, pero necesita construir apoyo electoral suficiente para ello. La consulta popular será clave para medir el piso político con el que cuenta el mandatario para cumplir su aspiración de gobernar Ecuador durante una década.

Leave a Reply

Your email address will not be published. Required fields are marked *