El candidato de Junts a la presidencia de la Generalitat, Carles Puigdemont, ha recuperado el famoso lema del independentismo “España nos roba” para convertirlo en una de sus principales banderas de la campaña electoral de las catalanas del 12M.
Este viernes el expresident realizó un llamamiento a ERC para hacer un frente común en el Congreso de los Diputados con el fin de revertir la “deuda histórica” que, según defendió, mantiene el Estado con Cataluña por el “déficit fiscal” del modelo actual de financiación.
Según el líder secesionista prófugo, España le debe a Cataluña 450.000 millones de euros por la recaudación y gestión de los impuestos en esta región.
Puigdemont ha reivindicó que la comunidad “tiene que decir basta al déficit fiscal” con un Govern “que se haga respetar, que no se conforme cuando le digan que no”.
“Cataluña es un motor económico, esto no lo discute nadie, las cifras ahí están. Pero este motor empieza a tener una avería, y esta avería, este problema grave se llama espolio insostenible”, ha señalado.
En este sentido, el candidato a la presidencia ha avanzado que, si logra presidir la Generalitat, dividirá el ámbito económico de la administración catalana en dos grandes áreas: una para asumir las competencias de hacienda e infraestructuras y la otra centrada en los asuntos de de innovación, investigación y universidades.
De sus palabras se deduce que, en caso de que logre presidir el Ejecutivo, liderará un Govern de coalición, por lo que ha dicho que es necesario que los republicanos formen con ellos un “frente común” en Madrid para mejorar la financiación.
Y ha reiterado que, si el Gobierno de Pedro Sánchez no cede los tributos a Cataluña, votarán en contra de los Presupuestos Generales del Estado.
Esta tesis ha sido la que ha defendido como parte central de su discurso en un acto sobre economía celebrado este viernes en la localidad francesa de Argelès-sur-Mer (Francia) en el que también han comparecido los números dos y tres de su candidatura, la empresaria Anna Navarro y el exconseller Josep Rull.
Rull, por su parte, insistió en que la presión fiscal que sufren los catalanes busca “compensar el déficit fiscal y el déficit de infraestructuras” por parte del Estado.
“La propuesta que hacemos no es la de rebajar la intensidad de los servicios públicos, sino ir a buscar estos recursos allí donde están, que es en el déficit fiscal”, advirtió el dirigente de Junts en cuanto a la propuesta económica con la que acuden el 12M.
