Aena considera puro postureo las críticas que desde el sector turístico y desde las aerolíneas se han vertido contra su decisión de subir las tarifas aeroportuarias desde el pasado 1 de marzo un 4,09%. Su presidente, Maurici Lucena, ha asegurado este jueves que le “asombra el dramatismo impostado con tintes apocalípticos” de las críticas de operadores del sector turístico a la subida de tarifas del gestor en 40 céntimos por pasajero para este 2024.
Durante su intervención ante la junta de accionistas de la sociedad, Lucena ha cargado con fuerza contra las críticas a la “modesta” subida de tarifas, sobre todo porque se producen en un momento en que los operadores turísticos están teniendo cifras de récords históricos, que no se han visto afectados por ese aumento.
Para Lucena, se trata de un debate “desenfocado” porque si las tarifas se definen de manera “inadecuada, empujándolas insensatamente a la baja” a largo plazo se producirá la “insostenibilidad económica del sistema aeroportuario”. “No parece razonable solicitar una cosa y la contraria: no es sensato pedir que Aena aumente fuertemente las inversiones y por otro lado, que rebaje permanentemente, sin suelo y en una espiral infinita, sus tarifas, que son las que financian la expansión de los aeropuertos”, ha afirmado.
El presidente de Aena considera que los precios que marca la compañía son “con diferencia” los más bajos de Europa y la metodología para su cálculo emana de una directiva de la UE y de las normas españolas.
Aena ha reiterado en varias ocasiones que las tarifas, avaladas por la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMV), son inferiores a las de 2019. Entre 2015 y 2023, las tarifas de Aena han bajado nominalmente un 11%. En ese periodo, la inflación ha sido del 21%. En términos reales, estas tarifas han bajado un 32% en el período 2015-2023, según asegura la compañía que preside Lucena.
Críticas
El incremento de las tarifas ha suscitado un rechazo frontal por parte de las aerolíneas. La patronal ALA ha insistido en que se trata de una decisión equivocada porque, según asegura, las compañías aéreas todavía se están recuperando de los efectos del coronavirus, que dejaron sus cuentas bastante maltrechas. En su opinión, la subida provocará un incremento de precios de los billetes, lo que puede afectar al tráfico y, por extensión, al turismo.
La más beligerante de todas ha sido Ryanair. La “low cost” irlandesa, que es líder en España por número de pasajeros transportados, ha advertido de que no descarta poner en revisión sus planes para invertir 5.000 millones de euros en los próximos años en España que, asegura, se sustentan en la congelación tarifaria. Ryanair considera que Aena no ha cumplido con la congelación de tarifas hasta el año 2027 que se había prometido.
La junta de Aena tiene previsto aprobar hoy el reparto del mayor dividendo de su historia, 1.150 millones de euros, después de tres años de congelación por la crisis del coronavirus. La entrega se realizará el próximo 7 de mayo y el más beneficiado será el Estado, que es propietario del 51% del capital de la compañía a través de Enaire y que recibirá 583 millones de euros.
